La dieta BARF (Biologically Appropiate raw food) consiste en
suministrar alimentación cruda cárnica (
pollo, carne de res, pescado, ovejo) unida también a vegetales crudos, tanto a
perros como a gatos; Proporcionando una dieta natural , libre de elementos
químicos y cuya palatabilidad sería lo más cercano a lo que han consumido estos
animales durante su desarrollo evolutivo a través del tiempo.
Su uso, en la actualidad, representa un choque frente al
empleo de alimentos concentrados en forma de “pellets ”o “croquetas” para
mascotas, elaborados por empresas altamente calificadas y de vasta experiencia
en el ramo.
No obstante teniendo presente los pros y los contras que cada
grupo manifiesta, la veracidad de cada argumento siempre será controlada y
regulada por la opinión científica y oficial al respecto.
En favor de la dieta BARF se expone el hecho de que los
animales se alimentan tal como lo hacían desde sus inicios: Alimentos crudos
sin cocinar, frescos, que aumentan la inmunidad, preservan la dentadura,
incrementan el apetito, favorecen el fortalecimiento del pelaje, además de
aumentar la energía y vitalidad del animal y no presenta conservantes.
En favor de los alimentos concentrados en forma de pellets
para perros y gatos , las compañías productoras cuentan con centros de
investigaciones (St. Joseph Missouri Nestlé Purina´s Research and Development) donde
estudian las características comportamentales, fisiológicas, de adaptación y
aceptación de los perros y gatos frente a este tipo de alimento, se hacen
análisis de palatabilidad, digestibilidad, absorción , nutrición y actitud del
animal frente a la forma, color, sabor y olor del alimento presentado.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los
Estados Unidos, a través de: FDA Center of Veterinary Medicine hizo un estudio entre octubre del
2010 y julio del 2012 sobre 196 muestras de alimento crudo para mascotas expuestos
al público, para la comercialización; Comprando online a diferentes centros de
elaboración del producto, los cuales fueron posteriormente enviados a 6
laboratorios distintos.
El resultado fue que de las 196 muestras 32 presentaban la
bacteria Salmonella y 15 presentaron la bacteria listeria Monocytogenes ambas
causantes de una enfermedad llamada foodborne desease causante de: Náuseas,
vómitos, diarrea, calambres y malestar general.
La conclusión de esta investigación presentada por el Dr.
Renate Reimschuessel, fue que este tipo de alimento representaba un riesgo
potencial para la salud pública tanto de las mascotas que la consumieran como
de las personas que las manipularan, ya que al no lavarse bien las manos
podrían dejar contaminada cualquier superficie que tocaran, tales como: Ropa,
neveras, mesas etc. y enfermarse si se llevaban las manos a la boca.
Muchas son las opiniones que se siguen manejando sobre este
tipo de alimentación, que si bien es cierto con un buen manejo de los alimentos no deja de
ser una opción valedera para alimentar a las mascotas ( perros y gatos ); No es
menos cierto que años de investigación que garantizan los mismos beneficios
también proporcionan mayor comodidad y manejo de la mascota ya que aportan
mayor facilidad en la limpieza de las defecaciones y al mismo tiempo, las hacen
menos fétidas, también hay que tener presente que para que el cuerpo del animal
pueda alimentarse con los nutrientes que aporta la dieta cruda de carne, pollo
o pescado , el cuerpo necesita que se produzcan ciertas reacciones metabólicas
que en muchos casos son largas, donde intervienen : enzimas, vitaminas,
minerales y oligoelemetos , que en muchos casos están deficientes o ausentes en
la mascota que a pesar de verse bien por fuera ,puede tener esas deficiencias
por dentro y generalmente los alimentos concentrados traen todos esos elementos
facilitadores de la digestión; Aunado a esto es bueno considerar que los
animales de compañía en la actualidad viven en sitios más restringidos
espacialmente y su comportamiento ha cambiado ostensiblemente, dado el sitio
que ocupan al lado de las personas, adoptando conductas muy alejadas de su
actuar original, manteniendo un contacto más estrecho con su propietario
asumiendo actitudes y funciones que lo ubican estrechamente en la vida
hogareña, ocupando en muchos casos el espacio de un miembro más de a familia. Estos
cambios en el modus vivendi de nuestro compañerito felino o canino también
deben tenerse presente al decidir cómo alimentarlo , y hacer más placentera su
convivencia dentro del grupo familiar humano al cual pertenezca…